En los sistemas fotovoltaicos aislados para el hogar, las baterías son el corazón del sistema de almacenamiento de energía. La elección de la batería adecuada puede influir en la eficiencia y vida útil del sistema.

Aquí te presentamos los tipos de baterías más comunes para sistemas solares pequeños
1. Baterías de Plomo-Ácido de Ciclo Profundo
Las baterías de plomo-ácido son una opción popular y económica para sistemas fotovoltaicos aislados. Dentro de esta categoría encontramos dos tipos principales: baterías de plomo-ácido inundadas y baterías selladas de gel o AGM (Absorbent Glass Mat).
Profundidad de descarga (DOD): Típicamente entre el 50% y el 60%. Estas baterías deben evitar descargas profundas, ya que pueden reducir su vida útil.
Eficiencia: Generalmente del 70% al 85%.
Durabilidad: Su vida útil es de 3 a 5 años para baterías de plomo-ácido convencionales y de 7 a 10 años para las selladas, dependiendo del uso y mantenimiento.
Las baterías de plomo-ácido inundadas requieren mantenimiento regular, como revisar los niveles de agua, mientras que las de tipo gel o AGM son libres de mantenimiento. Aunque son asequibles, el límite de su profundidad de descarga puede ser una limitación para usuarios que requieren un uso intensivo.
2. Baterías de Ión-Litio
Las baterías de ión-litio han ganado popularidad en los últimos años debido a su alta eficiencia y capacidad de descarga profunda. Aunque son más costosas que las de plomo-ácido, su rendimiento y longevidad las convierten en una opción atractiva para instalaciones solares residenciales.
Profundidad de descarga (DOD): Pueden soportar descargas de hasta el 80%-90% sin comprometer significativamente su vida útil.
Eficiencia: Alta eficiencia, entre el 90% y 95%, lo que permite aprovechar mejor la energía generada.
Durabilidad: Tienen una vida útil de 10 a 15 años y soportan más ciclos de carga que las baterías de plomo-ácido.
Las baterías de ión-litio son ideales para quienes buscan un sistema de bajo mantenimiento y mayor durabilidad. Su alta eficiencia y capacidad de descarga profunda las hacen perfectas para aplicaciones solares en el hogar, aunque el costo inicial es considerablemente más alto.
3. Baterías de Fosfato de Hierro-Litio (LiFePO4)
Las baterías de fosfato de hierro-litio (LiFePO4) son una subcategoría dentro de las baterías de litio, diseñadas para ofrecer mayor seguridad y estabilidad térmica. Son altamente resistentes al sobrecalentamiento, lo que las hace más seguras y confiables.
Profundidad de descarga (DOD): De hasta el 90%, similar a las de ión-litio.
Eficiencia: Alta, entre el 95% y el 98%.
Durabilidad: Su vida útil es de 10 a 20 años, siendo una de las opciones más duraderas para almacenamiento en energía solar.
Las baterías LiFePO4 son más seguras y tienen una vida útil más prolongada que las de ión-litio convencionales, aunque son más costosas. Su alta eficiencia y capacidad de descarga profunda las convierten en una excelente opción para quienes buscan un sistema robusto y de larga duración.
Conclusión
La elección de la batería adecuada para un sistema fotovoltaico en el hogar dependerá del presupuesto, las necesidades de energía y el mantenimiento deseado. Las baterías de plomo-ácido son accesibles y funcionan bien en aplicaciones de bajo presupuesto, mientras que las de ión-litio y LiFePO4 ofrecen una mayor eficiencia y durabilidad a un mayor costo.